Psicología para afrontar el confinamiento. Crisis COVIP-19.

31.03.2020

En estos momentos de máxima incertidumbre, la fortaleza psicológica se vuelve clave para nuestra salud física.

Todo lo nuevo e incierto requiere de un período adaptativo, y más cuando la situación de confinamiento es impuesta y debida a un virus no observable y aparentemente incontrolable.

Para el mejor manejo de las emociones en esta situación de conflicto, es preciso tener en cuenta lo siguiente:

-Acepta las emociones: seguramente estés en un momento contradictorio, y esto genera frustración, quieres aprovechar el tiempo, pero no te concentras; quieres no obtener la información, pero buscas en Internet los nuevos datos; quieres aprovechar para hacer ejercicio, pero no tienes ganas.

Todo esto es normal, no te fustigues, ya tienes bastante con la realidad como para imponerte más "deberías", puesto que sino cumples con los deberías lo más probable es que empieces a desarrollar culpabilidad.

-Practica la vida lenta: hay tiempo, programa actividades con más tiempo del que te otorgarías o tendrías habitualmente para desarrollarlas. Si algo te ocupa media hora, no importa que esta vez sea una hora de dedicación.

-Respira: toma tiempo para tomar consciencia de tu respiración y tu cuerpo. Céntrate en observar el proceso respiratorio, es el primer paso para poder manejar la ansiedad en un futuro.

-Pensamientos negativos: es probable que estos días pasen por tu cabeza pensamientos que no hagan bien a tu estabilidad psicológica, a todos nos va a pasar, es aquí cuando te propongo el siguiente ejercicio:

  • Cuando te encuentres bien, enérgico y con ánimos, escribe un listado de pensamientos adaptativos, realistas y comprensivos contigo mismo, practicando la empatía con tu "yo".
  • Lee este escrito, mientras práctica la respiración y repasa mentalmente estos pensamientos.
  • Si es necesario, SÓLO PRESTA ATENCIÓN A TU RESPIRACIÓN, y cuando observes que es más profunda y más lenta, vuelve a leer el escrito.
  • Una vez hayas controlado tu nivel de activación, realiza una tarea mecánica que no requiera mucha precisión ni mucho esfuerzo físico ni mental. Ejemplos: limpiar, cocinar, hacer un sudoku, ordenar el armario, etc.

Sin duda son momentos difíciles, pero hemos de ser responsables y solidarios para afrontar con éxito ésta situación. Acepta que nuestros ánimos fluctuarán durante los días, pero que todo pasará.

Escrito por: María Álvarez, AN08209.