Vuelta a la rutina

Es momento de leer muchas veces "depresión post-vacacional", lo cierto, es que más que una depresión, que obviamente no es, es más bien un problema adaptativo, como se dice comúnmente nos adaptamos rápido a lo bueno, es decir, cuando estamos en un periodo vacacional se supone, digo "se supone" porque hay personas que nunca logran desconectar de ciertas responsabilidades y esto les impide disfrutar de su periodo de descanso.

Realmente aunque logremos relajarnos, liberarnos de ciertas circunstancias estresantes, conviene no evadirnos totalmente de la realidad porque quizá tengamos pequeñas cosas que si no las atendemos sufriremos las consecuencias más tarde.

De todos modos, voy a escribir unas recomendaciones para que la vuelta a la rutina sea más llevadera:

• Levantarse progresivamente más temprano: al menos la semana de antes de volver al trabajo para así irnos acostumbrando al horario con el que dará comienzo nuestra jornada laboral.
• Levantarnos con tiempo: para poder hacer las cosas con tranquilidad, disfrutar del desayuno, de asearse, algunos estiramientos para quien lo considere, empezar el día sin estrés ni corriendo es un factor importante para afrontar de una manera más saludable todo lo que queda.
• Comenzar con las cosas más prioritarias: y dentro de las prioritarias las más sencillas o simples, para así calentar motores, y ya habiendo empezado y con tiempo suficiente nos pondremos con las cosas prioritarias que son algo más importantes.
• No intentes poner al día en un momento: date tiempo para adaptarte, para preguntar, para informarte, para organizar, para descansar si es necesario; si intentas abarcarlo todo del tirón probablemente esto te genere ansiedad y te frustres porque te será difícil llevarlo todo a cabo.
• Media hora para ti (o el tiempo que puedas): momentos de relax y de ocio, importantes para recuperar fuerzas, desconectar si se está saturada/a, date prioridad y cuídate.
• No olvides a tu pareja: más bien no os olvidéis, tras las vacaciones habéis tenido probablemente más momentos de intimidad, sigue potenciándola en la cotidianidad de los días, hay que equilibrar los tiempos de cada cosa.
• Nuevas ilusiones, nuevos retos y nuevas metas: es el momento de generar ciertos objetivos que aporten ilusión y motivación a este nuevo curso.

Sin más esto son algunos consejos que pueden ayudarnos a afrontar mejor la vuelta a la rutina y que nos pueden ayudar a incorporarnos al ritmo del día a día de manera más agradable y con ilusión.

Escrito por: María Álvarez, AN08209